En China, más jóvenes se están acercando a Jesús, gracias a las escuelas cristianas estadounidenses. Pero no solo ellos están siendo impactados por la fe, sino sus padres también
La educación en China está cambiando… conforme más escuelas cristianas estadounidenses abren nuevas locaciones en el país asiático.
A pesar de las restricciones gubernamentales sobre la religión, los cristianos de ambos países trabajan juntos para proporcionar a los alumnos chinos una educación basada en verdades bíblicas.
Sean Elgut es el director de Veritas Christian Academy, de Virginia. En 2014, una Asociación Educativa de Estados Unidos la seleccionó como una de las mejores escuelas cristianas del país americano. Elgut y su esposa sienten que Dios les dio una nueva misión.
“Sentí como que el Señor nos decía: ‘Tienen que estar dispuestos a ser como Daniel, en medio de aquellos que no están totalmente a salvo. Ustedes harán una gran impresión, yo quiero que lo hagan’”, comenta Maria Elgut, de Veritas Christian Academy.
Sean Elgut dice que aunque muchos chinos son ateos o budistas, muchos padres están abiertos al Cristianismo. Algunos, incluso, motivan a sus hijos a aprender todo sobre Cristo.
“La mayoría de ellos nos dirán: ‘Por favor, introduzca a nuestros hijos a su fe. Para que talvez ellos la reconozcan como su religión, lo llamen su Dios, lo llamen su Jesús, debido a que queremos que nuestros hijos crean en algo’”, indica Sean Elgut.
Los estudiantes aprenden valores cristianos en el aula. Sus maestros pasan tiempo de calidad con ellos, con la esperanza de llevarlos a los pies de Cristo.
“Ellos son muy abiertos y son honestos contigo. Es más fácil dar testimonio a muchos de estos chinos que a los americanos, por el hecho de que ellos vienen con la mente en blanco cuando están tristes, así que ellos se emocionan cuando participan en eventos cristianos”, comenta Sean Elgut.
Y los niños pequeños no son los únicos emocionados por su educación cristiana aquí. Los millennials chinos también están abiertos y entusiasmados. Algunos ven que la Biblia no es solo un libro, sino una manera de vivir con alegría y felicidad.
Además de alcanzar logros académicos, Crystal Lu y Wang Zhao Yuan también aceptaron a Cristo. Los valores bíblicos tocaron sus corazones.
“Antes de ir a la escuela, sabía muy poco sobre Jesús. En clases, he aprendido tanto sobre Dios y su amor por sus hijos. Mis padres cristianos están extremadamente felices que el Señor finalmente proveyó un camino para que yo también pudiera conocerlo. Hoy, mi familia entera es cristiana”, comenta la estudiante Crystal Lu.
“También disfruto tener conversaciones de uno a uno con los maestros. Cuando oraron conmigo, me sentí mucho mejor. Mi corazón ya no estaba tan cargado”, indica el estudiante Wang Zhao Yuan.
Conforme se matriculan más estudiantes chinos en las escuelas cristianas, más padres se están involucrando con los cristianos locales. Principalmente, porque han visto el cambio en sus hijos y no pueden evitar preguntar por qué.
“He visto cómo los maestros les enseñan a mis hijos los principios bíblicos. Me pregunto si debería saberlos también. No estoy en contra de ello, quiero tener una conversación con mis hijos”, indica la madre de unos estudiantes.
Los padres chinos creen que una de las labores más importantes es criar hijos a vivir una vida exitosa. Cada vez más, las familias están recurriendo a la religión para crear un impacto positivo para la siguiente generación. Las escuelas cristianas no solo esperan matricular más millennials, sino oran que los padres conozcan la verdad sobre Jesús.
“A pesar de que él estaba trabajando para una escuela cristiana, nosotros estábamos en fe sabiendo que esa oportunidad a crecer, que Dios nos iba a dar una escuela cristiana. Es muy difícil que usted haga esto, pero nosotros de todos modos lo hacemos, ya que sabíamos que era algo de Dios y que Él iba a hacer esto”, concluye Maria Elgut.
F: Mundocristiano.tv